Marina Pina Zaragoza
Zaragoza
Actualizado
Varios centenares de coches hacían cola a las puertas de la Academia General Militar. Vehículos plagados de civiles vestidos de manera elegante para celebrar que sus hijos recibían hoy el empleo de teniente después de cinco años de esfuerzo y formación. Son 456 los alumnos que hoy terminan su etapa académica y, junto a ellos, la Princesa de Asturias.
La heredera al Trono finaliza hoy su primer curso de formación castrense, que la ha tenido todo el año en La General. Lo hace con buenas calificaciones y plenamente integrada entre sus compañeros, pero con las distinciones de quien está llamado a ser capitán general de las Fuerzas Armadas. Es por ello que, antes de que comenzara la entrega de despachos de los tenientes, Doña Leonor tuvo su distinción particular.
A las 11.10 de la mañana todo estaba preparado en el patio principal de la Academia. En los laterales, ocho tribunas estaban repletas de familiares de los alumnos. En el centro, una tribuna de honor. Y a lo largo de la explanada, ocho compañías de cadetes, dos de alféreces y cuatro de tenientes formaban. La disposición de la Princesa de Asturias remarcaba su destino y su soledad ella, en un lugar destacado, con el uniforme de gala del Ejército de Tierra y los cordones que la distinguen aún como estudiante. Leonor, como el resto de sus compañeros, espero en descansen la llegada de sus padres y su hermana, la Infanta Doña Sofía.
Daban las medias y el fuerte cierzo con el que había amanecido Zaragoza amainaba cuando los Reyes Don Felipe y Doña Letizia, acompañados por la Infanta Doña Sofía, entraban en el patio. La banda de música interpretó el himno de España y se dispararon 21 salvas. El Rey pasó revista a las tropas antes de saludar a las autoridades. Acudieron la ministra de Defensa, Margarita Robles; el presidente de Aragón, Jorge Azcón y a la alcaldesa de Zaragoza, Natalia Chueca. También el Jefe de Estado Mayor de la Defensa, el general Amador Enseñat, y el del Cuarto Militar de la Casa del Rey, Gracia Cirugeda, que ocuparon su lugar en la tribuna para realizar la oración de acción de gracias.
Gran Cruz del Mérito Militar
La Princesa de Asturias estaba situado en un lugar diferenciado, junto a los alféreces que este miércoles recibían el empleo de tenientes. Un narrador anunció el nombramiento de Doña Leonor como alférez. En ese momento, la Princesa de Asturias se dirigió a la tribuna de honor con paso militar. Don Felipe dio un paso al frente y en ese momento se mezcló la solemnidad con la emoción. La Princesa realizó un saludo marcial ante su padre, que es también el capitán general de las Fuerzas Armadas. Este, entregó a la Heredera su diploma. También le impuso la Gran Cruz del Mérito Militar, con distintivo blanco. Se trata de la misma condecoración que recibió su padre en 1986 cuando finalizó sus estudios en la General. Rompieron en ese momento el protocolo para fundirse en un abrazo.
Tras ese momento de emoción contenida, que despertó unos aplausos improvisados entre los familiares del resto de alumnos, la Heredera se dirigió al interior de la Academia. Doña Leonor dio muestras de su madurez, caminando impertérrita y concentrada hacia la puerta lateral, pese a que los ojos de cuatro mil personas estaban puestos sobre ella. La Princesa dejó su sable y se dirigió a la tribuna para seguir el resto del acto. Allí, la Heredera recibió un profundo abrazo de su madre, la Reina Letizia, y de su hermana, la Infanta Sofía, que este es su primer acto castrense en la Academia.
"Vamos a echar de menos a la cadete Borbón Ortiz"
Felipe VI ha entregado los reales despachos e imposición de condecoraciones a los tenientes distinguidos, se trata de 12 soldados que han sido el número uno de sus armas. A continuación, la Familia Real siguió la entrega de los reales despachos al resto de miembros de tenientes. Se vivieron momentos muy emotivos cada vez que un padre subía a entregar a su hijo el despacho.
Tras ello, el director de la academia, que hoy asciende a general de brigada, Manuel Pérez López, ha destacado en una alocución el paso de la heredera por la General. "Hoy, la Princesa de Asturias culmina un intenso curso en la Academia General militar", ha resumido el general antes de dirigirse a ella: "Alteza, vamos a echar de menos a la cadete Borbón Ortiz, habéis dejado huella en vuestros compañeros. Sé que os lleváis una gran mochila llena de experiencias, valores, conocimiento, amistad y compañerismo. Esa mochila os ha permitido conocer mejor y apreciar más a nuestro ejército de Tierra y a quienes forman sus filas, y os ha llevado a valorar la exigencia de la vida militar", ha subrayado.
El director general ha dicho que la Princesa se lleva "excelentes compañeros y amigos". "Nuestra más sincera felicitación por esa estrella que lucía en el uniforme. Que con vuestro esfuerzo, sacrificio y ejemplo os habéis hablado muy merecidamente".
